Estudio exploratorio sobre las afectaciones a la salud por la sobreexposición a redes sociales y pantallas con perspectiva de género

La Red de Atención a las Adicciones (UNAD), financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2023, ha realizado recientemente un estudio sobre las consecuencias de la sobreexposición a las redes sociales y pantallas desde una perspectiva de género y biopsicosocial.  

Este estudio pretende, además de mostrar los efectos físicos, psicológicos, emocionales y sociales de esta sobreexposición, abrir nuevas vías de investigación para hacer frente a este problema y desarrollar intervenciones para su prevención.  

Para la elaboración de este estudio se han realizado encuestas y entrevistas a las personas que se consideran afectadas por el uso que hacen las redes sociales (RRSS) y pantallas, así como a los profesionales y organizaciones que los tratan.  

Entre los trastornos físicos más comunes, tanto en hombres como mujeres, que cita el estudio, se encuentran los trastornos del sueño provocados por el número de horas frente a las pantallas, así como problemas posturales, problemas musculares, problemas de visión y la falta de atención. 

En cuanto a los problemas psicológicos, el estudio hace referencia a la disociación de la realidad que pueden experimentar principalmente los jóvenes al ver vidas, supuestamente perfectas, a través de las redes sociales (RRSS). Por otro lado, la preocupación por la aceptación entre iguales es un tema que cobra una especial relevancia entre los jóvenes y adolescentes, que exponen sus vidas cotidianas a través de las redes en busca de la valoración social que llevan implícita los "likes". Todo ello conforma un espacio de demanda permanente que puede tener consecuencias negativas, y repercutir en la autopercepción y autoestima. 

A nivel social, el estudio hace referencia a la intoxicación por información excesiva y a menudo no contrastada, así como a la creación de burbujas o cámaras que generan polarización. Si bien indica que estos fenómenos ya se producía a través de los medios de comunicación con anterioridad a la existencia de las redes sociales y plataformas, estos efectos se han visto incrementados por la mayor rapidez y mayor número de personas a las que se puede llegar a través de las RRSS.  

Según el estudio, la edad, el sexo y la influencia del género son factores que tienen una influencia directa en los efectos de las RRSS y pantallas. 

Así, por ejemplo, mientras que para los más jóvenes, las RRSS y pantallas son su medio de socialización y fuente de información, para los adultos estos medios no crean vínculos reales, además de ser una fuente de múltiples riesgos y de pérdida de tiempo. 

En lo que respecta al género, la sobreexposición a RRSS y pantallas tiene distintas consecuencias para mujeres y hombres. En el caso de las mujeres, los principales efectos son la baja autoestima (95%) y ansiedad (73%), ligadas en muchos casos a ciberbullying o ciberacoso, entre otros. Por su parte, los hombres sufren principalmente ansiedad (72%) y falta de atención (70%). 


El estudio también sugiere una serie de líneas de trabajo para abordar este problema y prevenirlo. Algunas de esta línea son: 
  • Promover el discurso intergeneracional, respetuoso y abierto.
  • Trabajar en la divulgación de contenidos inclusivos, éticos y respetuosos producidos por la gente más joven
  • Educar en la idea de que no es un problema individual.
Tenéis disponible el estudio completo en el siguiente enlace: 

Recursos de interés: 
Concilia-TIC: guía de buenas prácticas para el uso inteligente, óptimo y saludable de las nuevas tecnologías en la familia. Junta de Andalucía


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