En los últimos años, el envejecimiento de la población constituye uno de los fenómenos sociales de mayor impacto del siglo XXI.
La emergencia sobrevenida el último año debida a la pandemia COVID-19 en la cual las personas mayores han sido especialmente castigadas, ha puesto en evidencia la necesidad de abordar las nuevas situaciones sociales desde las administraciones públicas.
Hacemos eco, del documento publicado en 2018 por el
Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno de Aragón donde se
establece la “Estrategia la Atención y Protección Social para las personas
mayores en Aragón”.
Estas nuevas realidades sociales, junto con la
existencia de otros factores de carácter social y demográfico, como la pérdida
de redes de apoyo social,
Esta Estrategia se enmarca en 6 líneas de actuación
que constituyen los ejes en los que se ordenan los servicios, prestaciones,
recursos y programas de actuación que se están desarrollando desde el IASS,
orientados a promover el envejecimiento activo, la calidad de vida y el buen
trato:
- Garantía de Derechos y protección de las personas mayores.
- Promoción del envejecimiento activo: prevención de la dependencia y promoción de la autonomía personal.
- Atención a la dependencia.
- Participación y colaboración comunitaria.
- Coordinación y colaboración interinstitucional.
- Inspección de centros y servicios y promoción de la calidad.
Este documento también recoge una cartera de servicios, programas y prestaciones que se adaptan a las circunstancias y necesidades de las personas mayores en Aragón, y cuya gestión puede ser por parte del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), o a través de las entidades locales, en atribución de las competencias establecidas en materia de servicios sociales en el respectivo ámbito territorial.
También,
se hace especial hincapié en la actuación de las personas mayores que viven
solas donde hacen una propuesta de trabajo integral a través de un proyecto con
cuatro líneas de actuación donde se pretende abordar la atención de las
personas mayores que viven solas, preferentemente aquellas sobre envejecidas,
para así garantizar su bienestar emocional y seguridad, reducir su soledad y
combatir el riesgo de aislamiento y exclusión social.
Ya,
por último, la “Estrategia de Atención y Protección Social para las personas
mayores” presenta un programa de coordinación contra los malos tratos de las
personas mayores y promoción del buen trato sirviendo de instrumento a los
profesionales, en especial de servicios sociales, y a los distintos actores
implicados en esta realidad para detectar y prevenir situaciones de malos
tratos de las personas mayores y al mismo tiempo conocer cómo se debería actuar
ante hechos de esta naturaleza. Entre los instrumentos se destaca la guía: “El
trato a las personas mayores. Promoción de buen trato y detección de malos tratos”.
Para conocer mejor la estrategia y el contenido de la misma:
https://www.aragon.es/-/estrategia-de-atencion-y-proteccion-social-a-personas-mayores-en-aragon
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