Según Langarica Salazar, el envejecimiento es “una sucesión de modificaciones morfológicas, fisiológicas y psicológicas, de carácter irreversible, que se presentan antes de que las manifestaciones externas den al individuo aspecto de anciano”. Debido a su carácter irreversible no podemos evitar o frenar este envejecimiento, por lo que nuestro objetivo será fomentar la consecución de un envejecimiento saludable. El envejecimiento saludable no solo es la ausencia de enfermedad si no que se define como el proceso de fomentar y mantener la capacidad funcional que permite el bienestar en la vejez.
El deterioro de la capacidad funcional conlleva a la larga una disminución de la independencia, provocando limitaciones en la realización de las actividades de la vida diaria, entre otras consecuencias.
Según la bibliografía actual, la intervención que más efectividad ha demostrado en la mejoría de la capacidad funcional y el estado de salud global en las personas mayores es la realización de programas de actividad física, sobre todo en aquellos colectivos ya considerados como frágiles. La actividad física reduce la incidencia y el riesgo de caídas, mejora o evita enfermedades crónicas, reduce la morbimortalidad y previenen la sarcopenia, el deterioro funcional y la discapacidad.
Un buen ejemplo de prescripción de ejercicio físico multicomponente para mayores de 70 años, es el programa VIVIFRAIL donde se establecen la dosis, volumen, frecuencia e intensidad de los ejercicios, algo fundamental para poder realizar un seguimiento y observar la progresión. El ejercicio multicomponente se basa en trabajar los 4 grupos:
- Fuerza y potencia
- Cardiovascular
- Equilibrio y marcha
- Flexibilidad
Previo a su prescripción debe realizarse el test VIVIFRAIL para adaptar el ejercicio más recomendable a su capacidad funcional y riesgo de caídas de la persona mayor. También una pequeña revisión clínica por personal sanitario, considerando los riesgos, las contraindicaciones, antecedentes y teniendo en cuenta las patologías de base.
El test VIVIFRAIL valora la capacidad funcional mediante el SPPB (Short Physical Performance Batery) y una batería de 4 pruebas que permiten evaluar el riesgo de caídas. En caso de tener limitaciones para realizar el SPPB, se recomienda medir la velocidad de marcha en 6 metros.
Según la funcionalidad de cada individuo quedan clasificados en: Discapacidad, fragilidad, prefragilidad o robusto. Existe un “pasaporte” o programa de ejercicio específico para cada uno de los estados en los que se encuentra la persona. En algunos de ellos podemos encontrar el símbolo “+” indicados especialmente para aquellas personas con elevado riesgo de caídas.
A partir de estos pasaportes se establecen unas ruedas específicas de ejercicios adaptados a la capacidad funcional en la he que ha sido valorado cada individuo.
Una de las grandes motivaciones para los individuos es que siguiendo estos programas de ejercicio podrán notar una gran mejoría, como por ejemplo: pasar de tener gran dificultad para levantarse de una silla a poder realizar esta acción con absoluta autonomía y seguridad.
Dado los cuantiosos beneficios que nos ofrece el ejercicio físico multicomponente recomendamos su prescripción a través de programas como Vivifrail.
También puedes consultar el e-book Vivifrail: programa de ejercicio físico multicomponente
Ana Mateo Abad
Enfermera Especialista en Geriatría. Hospital San José de Teruel
Comentarios
Publicar un comentario