La obesidad infantil es uno de los principales problemas de salud pública a nivel internacional y se asocia, junto con el sobrepeso, con numerosos problemas de salud tanto físicos (enfermedades cardiovasculares, diabetes, mayor riesgo de cáncer...) como mentales (baja autoestima, depresión, ansiedad...). Su prevalencia es tan elevada que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la ha declarado “epidemia del siglo XXI”
España se sitúa entre los países europeos con mayor prevalencia de sobrepeso y obesidad infantil, en concreto, es el tercer país europeo con mayor prevalencia de sobrepeso y el cuarto en obesidad según datos del informe de la iniciativa COSI (Childhood Obesity Surveillance Initiative) de la oficina regional para Europa de la OMS. Cuatro de cada diez niños y niñas presentan exceso de peso en nuestro país (datos del estudio Alimentación, Actividad física, Desarrollo Infantil y Obesidad - ALADINO3), así como tres de cada diez adolescentes (según datos del estudio Physical Activity, Sedentarism and Obesity in Spanish Youth - PASOS4).
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En este escenario, se ha elaborado el Plan Estratégico Nacional para la Reducción de la Obesidad Infantil (2022-2030) que plantea la hoja de ruta para conseguir reducir el sobrepeso y la obesidad infantil y adolescente en España en un 25% durante la próxima década.
Sabemos que para prevenir y reducir la obesidad infantil los niños, niñas y adolescentes necesitan practicar regularmente actividad física, tener una alimentación saludable y mantener un adecuado bienestar emocional y buenos hábitos de sueño.
Este Plan propone actuar en los entornos donde la infancia y la adolescencia vive y crece, generando ecosistemas que promuevan y faciliten la adquisición de estilos de vida saludables.
Algunas de las medidas con las que cuenta el plan son:
- Línea estratégica 1 - Desarrollar un ecosistema social promotor de actividad física y deporte: impulsar la prescripción del ejercicio físico, aumentar las extraescolares de actividad física y deporte...
- Línea estratégica 2 - Desarrollar un ecosistema social promotor de una alimentación saludable: garantizar la oferta de comedor escolar en todas las etapas educativas, incrementar la densidad de fuentes públicas en pueblos y ciudades, apuesta por las tarjetas digitales para obtener ayudas alimentarias...
- Línea estratégica 3 - Desarrollar un ecosistema social promotor del bienestar emocional y el descanso adecuado: avanzar en medidas de conciliación familiar, incluir el cuidado de la salud mental en el currículo educativo...
- Línea estratégica 4 - Reforzar los sistemas públicos para promover los estilos de vida saludables: potenciar la Red Estatal de Ciudades Saludables, actualizar y modernizar los servicios sociales dirigidos a la infancia...
- Línea estratégica 5 - Garantizar la protección a la salud de la infancia: desarrollar regulación del marketing de alimentos y bebidas, desarrollar estrategias contra el ciberacoso, incluir las áreas periescolares en la planificación urbana...
- Línea estratégica 6 - Crear un cambio cultural hacia estilos de vida saludable: difundir recomendaciones adaptadas a edades y entornos, reforzar la formación de profesionales del entorno sanitario y educativo...
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