"Vive, crece, ama, libre": Guía para familiares y amigas/os de adolescentes víctimas de violencia de género

Esta guía tiene el propósito de acompañar, guiar y asesorar a los familiares y amigos/as de adolescentes que sufren violencia de género en su relación de pareja, con la intención de proporcionarles recursos a través de lecturas y experiencias, que les permitan entender cómo afecta psicológicamente este tipo de relaciones en la mente y conducta de su hija/amiga, así como para ayudarles a afrontar tal situación de una manera más adecuada, y acompañada.

Se hará un recorrido por los aspectos principales de la adolescencia para poder entender la vulnerabilidad de esta etapa evolutiva en su relación con las conductas violentas y machistas, para después adentrarnos en los mecanismos que predisponen, precipitan y mantienen dichas conductas en las adolescentes. 

Toda la información que contiene esta guía está basada en una base científica, con teorías explicativas de autores y autoras que trabajan en el ámbito de la violencia de género en adolescentes, en su experiencia profesional en dicho ámbito y en información con base empírica extraída de los testimonios recogidos de chicas y familiares que han pasado por una situación de violencia de género.

Estos relatos son testimonios reales de adolescentes víctimas de violencia de género y de padres y/o madres de servicios especializados. Los motivos que a una adolescente le hacen adentrarse en una relación de violencia son factores multicausales como se aborda a lo largo de la guía, pero uno de los principales se basa en la educación y el modelo que han vivido en el hogar.

La adolescentes que han convivido con microviolencias y micromachismos no reconocidos en la familia crecen normalizando conductas, y asumiéndolas dentro de su propio sistema de creencias. Muchas de las familias con hijas adolescentes que terminan en una relación de violencia de género se ven identificadas en situaciones de violencia invisible, quizás no hayan ido a mayores como en el caso de sus hijas, pero que son suficientes para que éstas las perpetúen y quizás las acentúen en su propia historia.

Con todo esto se recalca la importancia de nuestra labor como sociedad, padres y madres de involucrarnos en su recuperación haciendo coherente nuestro discurso con nuestros hechos. Las violencias invisibles se encuentran en todos los estratos de nuestra sociedad conviviendo con muchos de ellos sin ser conscientes. Sólo será identificándolos e intentando derrotarlos cuando podamos cambiar la historia aprendida a lo largo de tantos años. Es necesaria nuestra participación como adultos en este cambio para promover nuevas generaciones libres de violencias machistas.

Podéis consultar la guía entera aquí